jueves, 23 de febrero de 2012

El Cerrito Enmedio del Pantano

Hace poco más de un año viajé con mi papá a Acayucan, Veracruz...es un lugar feo, sin chiste y donde hace muchísimo calor (o al menos esa es la impresió que tengo yo). Después de andar llendo y viniendo por algunos pueblos cercanos por el trabajo de mi papá, nos fuimos a visitar San Lorenzo. Al principio creímos que iba a estar relativamente fácil llegar, porque la cabecera municipal más cercana, Texistepec, era un lugar que mi papá había visitado antes y se suponía que no era tan difícil llegar.

Estabamos viéndola demasiado fácil...el sitio está más o menos a una hora y media de Acayucan, en carreteras que se están desbaratando, terracería y cero señalamientos. Estuvo emocionante ver los puentes destruidos por la inundación que había pasado unos meses antes y que seguían ahí, tirados en medio de la nada...es interesante ver cómo el clima cambia...empiezas a ver planicies pantanosas que en algún momento debieron de haber sido selva y que ahora la modernidad arrazó.

En fin, llegamos a Tenochtitlán, que es el pueblo más cercano, a unos 10 minutos en carro del sitio y visitamos el museo comunitario, que a pesar de ser sólamente del tamaño de 2 cuartos medianos, tiene unas piezas verdaderamente increíbles y hermosas. El calor y la humedad influyen en la percepción del lugar...estás todo sudado y apestoso pensando "¿Cómo aguantaban este maldito calor?".

Después de tomar una cantidad grosera de fotografías, el cuidador del museo nos dijo cómo llegar al sitio. Nos subimos al carro y empezamos a ir en línea recta hasta que topamos con una especie de cerrito que aparece de la nada...subes, subes y subes unos 50 metros, llegas a la cima y de repente...nada. No hay nada. Vacas, unos cuantos árboles, mucho pasto, unas lagunitas por aquí y por allá, pero no se ve nada de lo que cualquier persona esperaría ver cuando le dicen que van a ir a un sitio arqueológico (o sea big pirámides).

 "Ay, qué aburrido, mejor vámonos". Eso diría cualquiera, y no lo culpo, porque no saben qué fue lo que pasó ahí, en ese "cerro" de 50 metros de alto en medio de un lugar no montañoso. ¿Qué pasó ahí hace 3200 años? ¿Quiénes vivieron ahí? ¿Por qué no se ve nada? ¿Ese cerro de dónde salió?

¿De verdad es un cerro?

Bueno, lo dejaré para la próxima entrada...


En el Pantano

En medio del pantano yacen grandes rostros de piedra. Sepultados, devorados por la tierra, aguardan el momento en el que sean venerados de nuevo. Incomprendidos, nadie los entiende, todos pelean por ver quien tiene la razón absoluta, cuando en realidad la verdad se perdió hace miles de años; no hay memoria alguna que nos pueda ayudar a recuperar los hechos del pasado.

Algunos han tratado más que otros el responder quiénes eran esos rostros; otros simplemente se han dedicado a robar, a destruir, saqueando tesoros materiales, cuando el verdadero tesoro es el conocimiento y no algo que  pueda decorar la colección de alguna persona ricachona. También el que se hace llamar científico, holgazanes, ladrones profesionales con título de arqueólogos, que únicamente sacan cosas de las entrañas de la tierra para después abandonarlas en una bodega.

lunes, 20 de febrero de 2012

San Lorenzo


Desde que leí acerca de los olmecas en una revista de Arqueología Mexicana cuando estaba en la prepa.¿Cómo iba a imaginar que estas personas se habían expandido por medio territorio nacional y de Centroamérica hace 3400 años? Eso suena increíble, o al menos me suena muy muy interesante a mí. Además, con eso de que cuando estás en la primaria sólo te dicen que habitaron Veracruz y que eran la cultura madre, no se profundiza lo suficiente como para entender el impacto que tuvo en Mesoamérica. Además, en mi ciudad natal vivo a escasas dos cuadras del Museo de Antropología de Xalapa, el cual alberga una colección verdaderamente impresionante de escultura olmeca, teniendo en sus acervo 7 cabezas de 10 del sitio arqueológico de San Lorenzo y de 17 que produjo esta cultura.

Como es muy extenso el tema de la arqueología olmeca y las fuentes de información son básicamente inagotables, decidí enfocarme en el ya mencionado sitio de San Lorenzo.

¿Por qué San Lorenzo y no otro sitio? Porque, personalmente lo encuentro muy fascinante, hipnótico y misterioso. Este sitio se encuentra en el sur del actual estado de Veracruz, en una zona altamente inundable cercana a la actual población de Acayucan. Durante muchos años, pasó desapercibido para los ojos de los grandes exploradores extranjeros que recorrieron México en busca de tesoros y pirámides y fue hasta la década de los 30's que el mundo se enteró de su existencia gracias al arqueólogo Matthew Stirling (Stirling 1957). Lo que atrajo a Stirling del sitio fueron los rumores que escuchó sobre cabezas colosales, comenzando las exploraciones en 1946 buscando principalmente monumentos de piedra (Stirling 1957).

Tuvieron que pasar cerca de 20 años para que de nuevo las miradas de los arqueólogos regresaran al sitio, cuando a principios de los 60's Román Piña Chan y Alfonso Medellín Zenil localizaron más monumentos (entre ellos una cabeza colosal) y decidieron trasladarlos al Museo Nacional de Antropología y al Museo de Antropología de Xalapa (Coe y Diehl 1980). Esto desató un pleito local, ya que los habitantes de la comunidad no querían que se llevaran las piezas, lo que provocó que el ejército interviniera (Coe y Diehl 1980).

Como esto va para largo,(aparte no quiero excederme) creo que es el momento preciso como para cortarle  y dejar un documental que encontré y que la verdad está muy bueno, aparecen varios arqueólogos de renombre y tiene información bastante buena :)

Referencias

Stirling, Matthew
1957    Monumentos de piedra de Río Chiquito Veracruz, México. La Palabra y el Hombre 4: 9-28

Coe, Michael y Richard Diehl
1980     In the Land of the Olmec. University of Texas Press, Austin.





miércoles, 8 de febrero de 2012

¿Qué hacer?

Todavía no he podido decidir qué tema desarrollar para esta clase...me gustaría hacerlo de arqueología olmeca, pero creo que ya he llegado a un punto en el que me gusta tanto y he hecho tantos trabajos acerca de eso que ya no sé qué más decir. Aún así, hay mucho de qué sacarle en cierto modo, aunque encontrar algo innovador sea relativamente difícil, lo que en la actualidad está medio "sonando" son estudios químicos de proveniencia para detectar las fuentes de origen de algunos materiales. Lo malo es que aparentemente no está muy bien visto en la clase el usar artículos viejitos pero chiditos, porque la verdad hay artículos que aunque son de hace más de 30 años, siguen aportando valiosa información.
Para la arqueología olmeca, los estudios de proveniencia servirían para confirmar o saber de manera exacta de dónde obtenían sus artículos de lujo, como el jade o ciertos pigmentos rojos como el cinabrio (óxido de mercurio) o las vasijas de cerámica. Con esto se pueden entender mejor las rutas de comercio y las relaciones entre diferentes regiones de Mesoamérica. También podría elegir hablar un poco sobre género, lo cual es una de las nuevas tendencias en arqueología y que no se ha aplicado directamente a la arqueología olmeca.
 De verdad que no sé qué demonios elegir...